Nombre: Sir Frederick The IV
Ubicación: MONTEVIDEO, MONTEVIDEO, Uruguay

Si hay algo que la Web y los espacios virtuales manejan a la perfección, es la idea de permanecer de incógnito. Y hare uso de mis plenos derechos diplomaticos virtuales.

miércoles, abril 18, 2007

Semana Santa en el mundo...



Tuve gracias a dios, la oportunidad de tener la semana santa en completo para asistir a todas las festividades y celebraciones que vive la comunidad cristiana en fechas tan importantes como esta (si , historicamente por mas que le quieran adosar otros contextos es la semana santa, y por esto y no otros motivos es que la gente tiene la oportunidad de descansar). Participamos del Via Crucis por el barrio y otras celebraciones en la catedral. No viene al caso tampoco transmitir necesariamente las emociones o reflexiones que me trajo a colaciòn, todo esto, pero si se vivio con fuerza.

Daba gracia ver como los informativos y programas periodisticos, enfatizaban sin mas las procesiones mas "extrafalarias" que rozan con lo pagano (no rozan casi que son) como los flagelantes de las Filipinas y demàs, emulando a sus antecesores Medievales.
Pero es natural que se resalte lo "extraño" lo que mas llama la atenciòn antes que lo profundo, lo que llena el ojo, lo que va por fuera, lo exterior.

Pero una vez mas celebramos su triunfo, el de Cristo, el triunfo de la vida sobre la muerte que para el cristiano tiene un valor mistico, pero que para el laico y agnostico que para cualquiera, sobre todo que viva en nuestra sociedad occidental, no significa mas que la esperanza, el progreso, el futuro, la mejora, la concepción lineal del tiempo y no circular. Prevaleceremos aún en la desolaciòn, como humanos. Los acontecimientos recientes, dan una visión mas sombria para aquellos milenaristas que buscan Armaggedones , o para el simple detractor que cree que esta todo perdido ya. Si, aunque la vida no es el fin último (pero por concepción logica el principio de todos los fines) nos debemos el trabajo de hacer de este mundo un lugar mejor, para nuestros hermanos para nosotros, para todos. El cristiano que es un optimista empedernido, (algunos diran exacerbado) ha empapado al mundo occidental de su voluntad férrea, teleologicamente, que nos ha llevado (junto a otros factores) a donde estamos hoy se quiera reconocer o no.

Resucito!!! y a la muerte, quien le teme?...